ella sobrevuela con sus besos mis pensamientos, y se los adueña, causa de mi sonrisa y felicidad, mi cuerpo reposa desnudo sin pudor, sin fealdad, ante ella, pletórico de confianza me descubro, sus besos se posan en mi alma y la miran de par en par, descuidado y débil, confiado y desarmado, no existe otro modo de amar, y por eso duele, duele su vulnerabilidad, la ausencia de mascaras y corazas, de artificios, rebosante de sinceridad, y en caso de descalabro, de ruptura, de duelo sentimental, tu yo más puro ha fracasado, su yo más puro ha errado, fracasa uno mismo, fracasa ella o fracasa el amar, eso solo el tiempo lo dirá, pero duele, vaya si que duele, tanto que uno se pregunta si merece la pena volverlo a intentar.