8.6.10


he vuelto a poner cuatro, en vez de tres tenedores en el mantel, a veces miro y creo que seguirás sentado en su sofá favorito, con un vaso de vino y una cerveza, desde que te has ido, el mundo me parece un sitio horrible para vivir, y alguien nos ha robado todas las sonrisas, madre anda seria, la abuela enferma, tus hijos intentan sobreponerse por ella, por tu mujer, pero todos estamos abatidos, me duele la mandíbula de tanto apretar los dientes de rabia, y mis nudillos se han estampado tantas veces contra la impotencia, que rosado y herido es su estado permanente, ya nunca más podrás hacerme el nudo de la corbata, cuando tengamos una boda o quede con alguna chica elegante, no me reñirás por dejar los tapones del gel abierto ni me recordarás que desenchufe los cables antes de dormirme, te has ido, y tu ausencia es tan grande como tu corazón, y todo lo llena tu vacío, lleno de dolor y tristeza, intento aparentar, pero en la cama, cuando el mundo me abandona, sobresalen las lágrimas y se vacía mi cuerpo, no puedo hablar de ello sin que mi voz se quiebre, un nudo aprieta mi garganta y mis ojos vidriosos delatan mi pena, te has ido joder, por qué coño tuviste que morirte, por qué, por qué, por favor, vuelve, estoy perdido, y la gente ha olvidado dar abrazos, vuelve, v u e l v e

No hay comentarios:

Publicar un comentario