somos hijos bastardos del suicidio, la sobredosis, el sida, el rap, se nos murió Kurt Cobain, Shanoon Hoon, Freddy Mercury, 2Pac, hijos criados por madres y preparados para ocupar su lugar, hijos de un puercoespín rosa , de enanos azules con una sola enana azul, de veranos azules, de hijos que se lanzaban al mundo en busca de su madre, y niñas que vivían en el monte y descubrían el monstruo de la ciudad, de tipos con cola que lanzaban ondas vitales y zodiacos nombrados caballeros, coches que se transforman y hombres arácnidos persiguiendo a Superman, somos la generación que abandonó a tristón, la del videojuego importado de Japón, la del macdonadls en cada esquina y los lagartos invasores comiendo ratones por televisión.

No tenemos una X para ser esa Generación, ni vivimos una Movida que contar, no tenemos una Ruta del Bakalao a la que culpar, ni una gran depresión curable con Prozac.

Hijos del matrimonio roto, el divorcio, del vivir en pecado, la pareja, la reconocida homosexualidad, de los padres permisores, hijos de la calle, del parque, del barrio, del banco, los hijos que vimos el horror del mundo en televisión, de los más de 2 canales, los que tenian telediarios en vez de cuentos para dormir, una generación mediatizada, bastarda, hijos bastardos que nunca llegaron a tener un sitio, un lugar.

Preparados para nunca llegar a serlo, el paso intermedio, la que perdió el vinilo y encontró el mp3, entre lo que había, hubo y habrá, el experimento, el conejillo necesario, somos hijos bastardos del suicidio, la sobredosis, el sida, la televisión.

Hijos bastardos sin nadie a quien culpar.